En el día de ayer, los secretarios
generales de la Federación de Industria de CCOO, MCA-UGT y PYMAR
enviaron al vicepresidente de la Comisión Europea, Joaquín Almunia, la
carta que os adjunto . Las organizaciones firmantes reclaman la adhesión
del conjunto de la Administración central, y de las autonómicas, al
llamamiento urgente del sector naval privado.
D. Joaquín Almunia
Vicepresidente Comisión Europea
Estimado Comisario:
Nos dirigimos a usted de forma conjunta para expresarle la preocupación común por el futuro del sector privado de construcción naval español, que a día de hoy está en sus manos. Nada de lo que le vamos a trasladar es nuevo para usted, cada uno de los firmantes de esta carta se lo ha hecho saber de una manera u otra.
Queremos que sepa que las Organizaciones Sindicales de las Federaciones de Industria de CCOO y MCA-UGT, con el conjunto de Astilleros Privados de España, integrados en PYMAR, compartimos desde la legitimidad de representar al conjunto del sector naval privado, la misma preocupación. Si la Comisión Europea decide solicitar a España la devolución de las ayudas por el llamado tax lease, automáticamente emitiría el certificado de defunción a un sector industrial, competitivo y tecnológicamente avanzado que emplea a 87.000 familias.
Después de más de dos años de procedimiento, las lesiones irreparables que se han producido a nuestro tejido productivo y la brutal pérdida de empleos, no debe ni puede verse todavía más agravada por las consecuencias directas del contenido de una resolución que incorporará la desaparición del sector en España. Es por ello que nos gustaría trasladarle las siguientes reflexiones:
1- La Comisión Europea, y en concreto el área de Competencia que usted dirige, cuentan con numerosa información y argumentos de carácter jurídico, que demuestra que las empresas españolas cuando se acogieron al sistema de tax lease estaban amparadas por los principios de confianza legítima y seguridad jurídica que tanto la Comisión Europea como el Tribunal han aplicado en casos similares.
2- La Comisión Europea debe saber que cualquier decisión que implique que los inversores acogidos al tax lease deban devolver las ayudas recaerá de forma indirecta en los astilleros españoles como consecuencia de sus compromisos contractuales, sumado al hecho de que estigmatizará para siempre el sector, ahuyentando definitivamente a los inversores y financiadores del negocio naval.
3- La Comisión Europea no puede aplicar a España un trato diferente al dispensado en cuestiones similares a otros países europeos como Francia. Europa ha decido apostar por su industria y no puede ahora y de un plumazo, tomar una decisión que terminaría con un sector industrial competitivo.
4- La Comisión Europea debe de ser consciente de que esta situación es consecuencia de
la falta de un sistema que regule la financiación en la construcción naval europea, lo que
provoca una guerra comercial entre Estados miembros de la UE, que puede terminar con
todo el sector naval europeo. Una industria y un empleo que se perdería para siempre en
Europa para mayor beneficio de países como China y Corea.
Señor Comisario, cuenta usted con información suficiente sobre todas estas cuestiones, pero si
desea hacernos cualquier consulta o aclaración estamos a su disposición. El propósito de esta
carta no es otro que trasladarle que en todas las cuestiones antes mencionadas, todos los
firmantes mantenemos criterios iguales. Esperamos sinceramente que la resolución incorpore
nuestra posición, sólidamente justificada, y propicie el desarrollo de una actividad de larga
tradición industrial en España, de la que viven 87.000 familias. Sepa también, que alargar en el
tiempo la resolución y por tanto, la no decisión sobre esta cuestión, está también estrangulando
al sector, que no logra firmar ninguna operación porque los inversores están a la espera de dicha resolución.
Gracias de antemano por su dedicación y por la de todo su equipo.
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