martes, 13 de febrero de 2018

EL COLUNGA RECUPERA LA SONRISA A COSTA DEL AVILÉS (1-3)





Real Avilés: Borja, Jaime, Marcos Blanco, Domínguez, Menéndez, Pandiani, Pasquina, balsera, Luis Nuño, Coutado y Rodríguez

Sustituciones: Escobedo por Marcos Blanco, 67 m; Tranche por Coutado, 78 m; Expósito por Jaime, 81 m.

C. D. Colunga: Jose Luis, Jairo, Busta, Marcos Arango, Girol, Sergio, Zucu, Viti, Naya, Matías y Naya.

Sustituciones: Usillos por Sergio 63m; Luis por Naya 72m; Manu por Matías 78 m.

Tarjetas: Por el Avilés amarillas para: Escobedo 79' y Borja 90'.

               En el Colunga: Sergio 42', Usillos 74' y Luis 75' con amarilla.

                Roja para Luis a los 90'.

             

Justa victoria del Colunga con la que rompe una racha de derrotas y empates que posiblemente comenzaban a causar cierto nerviosismo entre la plantilla y el cuerpo técnico.

No hubo que esperar mucho para que los poco más de 150 espectadores vieran situaciones de peligro en ambas áreas. A los 3', un error en el despeje de Borja desde el lateral del área, dejó el balón a pies de marcos quien a puerta vacía, a una distancia de unos 30 metros, vio como su disparo se iba por encima del larguero. Acto seguido, Balsera pone un balón franco a Mathieu quien ya dentro del área ejecutó un disparo que se fue al lateral de la portería colunguesa.

En el minuto 6, Marcos penetra por banda izquierda llegando casi hasta la línea de fondo, centra y Naya remata de cabeza mandando el esférico próximo a la cepa del poste contrario. Una combinación entre Matías y Viti, finalizó con un pase a Naya al punto de penalty en la que el delantero no pudo llegar a rematar al adelantarse Borja.



El primer gol llegaría a los 26' cuando una falta botada desde banda izquierda por Coutado, fue rematada por Domínguez llegando el balón a la altura del meta Jose Luis, quien en su afán por echarlo fuera, lo mandó al fondo de las mallas; 1-0.

Lo que en otras ocasiones  supondría un mazazo para las "huestes" visitantes, esta vez, no causaría problemas en su alternativa de juego; sin descomponerse, continuaron dando sensación de dominar el partido y esperanza a los escasos seguidores del Colunga que se acercaron al Suárez Puerta. Y así a los 44', un centro de Matías sobre el área, finaliza con una dejada de Naya a Zucu, el cual con un disparo raso, pone las tablas en el marcador; 1-1.



La segunda mitad, el Colunga, fue dueño y señor del partido. Los nervios en las filas locales se adivinaban con algunas de las acciones protagonizadas por sus jugadores.  En el minuto 46, Sergio bota una falta sobre el área, Borja no acierta a detener y Marcos manda el balón demasiado alto.

50', Viti roba un balón cerca del área rival, se lo pasa a Matías que entra por la izquierda y su centro no no acierta a ser rematado por ningún jugador colungués siendo la jugada anulada por fuera de juego de Naya.

A los 55', nueva galopada de Marcos por la izquierda, al borde del área se la pasa a Matías que se la devuelve de tacón y solo la salida del meta Borja evita el remate a portería del defensa del Colunga. Llegamos así al minuto 64, Viti se aprovecha de la indecisión entre Domínguez y balsera para despejar un balón cerca de su área, se lo pasa a Naya, quien remata en dos ocasiones sin obtener fruto alguno, llega nuevamente a pies de Viti quien con la derecha, hace subir el 1-2 al marcador, subsanando así el fallo que poco antes había tenido al mandar un balón fuera de portería encontrándose en una inmejorable situación.



El único disparo entre los tres palos en la segunda mitad por parte del Avilés corrió a cargo de Coutado en el 67, obligando a Jose Luis a estirarse para detener el balón. Dos más tarde, a los 69', la "puntilla" para los locales, Jairo despeja un balón desde dentro de su área, Naya, controla y avanza metros para enviarle un pase perfecto al hueco a Matías, el cual y antes de entrar en la zona de 16,50 metros de portería, se la pasa a Zucu que entrando desde la derecha y despues de dejar sentado al meta Borja, hace subir el 1-3 al marcador.



A partir de este momento, el Avilés lo intentaba con más ganas que realidades, pues su empuje, era fácilmente controlado con los colungueses.

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